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Showing posts from January, 2016

Vuelve el fin de la historia (Macri remix)

E ra 1989, y entre la masacre de Tiananmén y los sacudones de la perestroika, un tal Francis Fukuyama, miembro del Departamento de Estado y cerebro a sueldo de la RAND Corporation, ingresaba a la posteridad como autor del opúsculo neoconservador “¿El fin de la Historia?” A través de un trabajoso despliegue argumentativo, y de muy prudentes omisiones, Francis declaraba el triunfo de la razón hegeliana y el estallido definitivo de la “distorsiva lente marxista”, con su fea insistencia en una lucha de clases que a su entender había sido convenientemente resuelta por “el igualitarismo de la América moderna.” Fue así como, mientras la prensa declaraba el fin de la Guerra Fría, el autor nos invitaba a aceptar “el fin de la historia como tal”, es decir, “el punto final en la evolución ideológica del hombre y la universalización de la democracia liberal occidental como la forma final de gobierno humano.” Hoy, mientras la crisis del capitalismo sacude todos los rincones de planeta y golpea con

La importancia de narrar ante los shocks económicos

"C ualquier estrategia [política y económica] basada en aprovechar la ventana de oportunidad abierta por un shock traumático requiere del elemento sorpresa. Un estado de shock, por definición, es un momento en el que se produce una brecha entre los eventos que se desenvuelven vertiginosamente y la información que existe para explicarlos. El teórico francés Jean Baudrillar describe los actos terroristas como “excesos de realidad”; en este sentido, en los Estados Unidos, los ataques del 11 de septiembre fueron, en principio, eventos puros, cruda realidad, que no había sido procesada a través de historias, narrativas o de algo que pudiera reducir la brecha entre la realidad y su comprensión. Sin una historia, nos encontramos, como muchos de nosotros después del 11 de septiembre, en un estado de vulnerabilidad frente a aquellas personas que están a la espera de sacar ventaja del caos para sus propios fines. Tan pronto como desarrollamos una nueva narrativa que nos ofrezca una perspec

Un marco teórico para entender el populismo

“N uestro enfoque parte de una insatisfacción básica con las perspectivas sociológicas que, o bien consideraban al ‘grupo’ como la unidad básica del análisis social, o bien intentaban trascender esa unidad a través de paradigmas holísticos funcionalistas o estructuralistas. Las lógicas que presuponen estos tipos de funcionamiento social son, de acuerdo con nuestro punto de vista, demasiado simples y uniformes para capturar la variedad de movimientos implicados en la construcción de identidades (...)  El camino que hemos intentado seguir para tratar estas cuestiones es doble. Lo primero ha sido dividir la unidad del ‘grupo’ en unidades menores que hemos denominado ‘demandas’: la unidad del grupo es, en nuestra perspectiva, el resultado de una articulación de demandas. Sin embargo, esta articulación no corresponde a una configuración estable y positiva que podríamos considerar como una totalidad unificada: por el contrario, puesto que toda demanda presenta reclamos a un determinado orde

Ayer como hoy: cambian los actores, la historia es la misma

"E n el gobierno tuvo entre otros méritos, el de cumplir con su promesa de no enajenar ninguna parte de la riqueza pública ni ceder el domino del Estado sobre ella. En un asunto clave como el ferroviario, su acción fue fecunda, y demostró una comprensión cabal cuando, al vetar la ley del Congreso que traspasaba las líneas del Estado a una empresa mixta, afirmó en el Mensaje: “el servicio público de la naturaleza del que nos ocupa ha de considerarse principalmente como Instrumento de Gobierno con fines de fomento y progreso para las regiones que sirve”.  El apoyo a YPF, la tentativa de crear un Banco del Estado y un Banco Agrícola,  la  compra  de  barcos,  etc..,  son  otras  tantas  pruebas  de  su orientación nacionalista.  Su  política  internacional  fue  digna,  altiva,  independiente,  y  retomó  el sentido  latinoamericanista  que  poseían  los  hombres  de  la Independencia y que se perdió a mediados de siglo pasado. Es  bueno  insistir  sobre  el  manto  de  plomo 

Hegemonía y medios según Chomsky

"L os factores estructurales [que dominan el hacer de los medios de comunicación] son aquellos como la propiedad y control [de estos medios], la dependencia de importantes fuentes de financiamiento (en especial publicidad), y las relaciones e intereses mutuos entre los medios y aquellos que producen las noticias y tienen el poder para definirlas y darles sentido [agentes políticos y económicos]. [Nuestro modelo] también incorpora otros factores estrechamente relacionados con estos, como la habilidad [del estáblishment] para cuestionar el tratamiento mediático de ciertas noticias, para ofrecer ‘expertos’ que confirmen las tendencias oficiales acerca de las noticias, y para fijar los principios ideológicos naturalizados por el personal de los medios y la elite, pero usualmente resistidos por la mayoría de la población. A nuestro entender, las mismas fuentes de poder subyacentes, que controlan los medios y los financian a través de la publicidad, y que funcionan definiendo las notic

Hegemonía cultural para Marx y Engels

"L as ideas de las clases dominantes son las ideas dominantes en cada época; o, dicho en otros términos, la clase que ejerce el poder material dominante en la sociedad es, al mismo tiempo, su poder espiritual dominante. La clase que tiene a su disposición los medios para la producción material dispone con ello, al mismo tiempo, de los medios para la producción espiritual, lo que hace que se le sometan, al propio tiempo, por término medio, las ideas de quienes carecen de los medios necesarios para producir espiritualmente. Las ideas dominantes no son otra cosa que la expresión ideal de las relaciones materiales dominantes, las mismas relaciones materiales dominantes concebidas como ideas; por tanto, las relaciones que hacen de una determinada clase la dominante son también las que confieren el papel dominante a sus ideas." Karl Marx y Fredrich Engels (1974) La ideología Alemana.

Un encuentro de gigantes

"E n su trabajo Contribución a la historia de la Liga de los Comunistas , dice Federico Engels: 'En Mánchester, me había dado yo de bruces contra el hecho de que los fenómenos económicos, que hasta ahora no desempeñan ningún papel o solamente un papel desdeñable en la historiografía, constituyen una potencia histórica decisiva, por lo menos en la historia moderna; de que forman la base sobre la que surgen las actuales contradicciones de clase; y de que esta contradicciones de clase, en aquellos países en que han llegado a desarrollarse plenamente gracias a la gran industria, ... sirven, a su vez, de fundamento a la formación de los partidos políticos, a las luchas entre los partidos y, por consiguiente a toda la historia política. Marx no sólo había llegado a la misma concepción, sino que ya para entonces... [en 1844] la había generalizado en el sentido de que, en términos generales, no es el Estado el que condiciona y regula la sociedad civil, sino ésta la que condiciona y r