Skip to main content

Pensamientos usurpados 20: Qué es la democracia en realidad

Para mí, la democracia es un sistema que constituye un terreno de conflictos, que se pueden resolver de manera pacífica y con libertad. Eso es la democracia. No es algo que, en sí mismo, genera igualdad. Es un campo de luchas organizadas, que crean incentivos a las fuerzas políticas para obedecer las reglas. Cuando la democracia funciona, procesa varios conflictos en paz y sin violar demasiado la libertad.
[Adam Przeworski, Página 12 (20-03-11)]

Comments

Some said…
Grande esta cita, muy grande. Muy precisa.
Simud said…
Fui a dar con esta cita a poco de escribir el post sobre igualdad. Creo que es desmitificador y bastante exacto. Sólo agregaría algunos limitadores, como el autor hace sobre el final: 'bastante pacífica', 'con bastante libertad', 'en relativa paz'. Lo que queda claro es que la democracia es sólo una herramienta, un escenario con ciertas reglas que (de cumplirse) podrían conllevar al cambio social; pero que por sí misma, no asegura nada. Después de todo, también existen las democracias formales que en la concreción están más cerca de las tiranías que de otra cosa.
Some said…
Más un escenario que una herramienta, quizá. Y está claro que es un escenario preferible a muchos otros que hemos conocido precisamente a raiz de esos "bastante...", pero este argumento no tiene valor como un absoluto, que es como se presenta habitualmente con intención de mantener el (profundamente imperfecto) estado de las cosas.

Todo esto me hace pensar en el mito del progreso.
Simud said…
Escenario, para todos. Herramienta, para quienes la saben (o pueden) utilizar en su favor. Es interesante que aunque la democracia surgió de las élites en la antigüedad y fue reinstalada por nuevas élites en la mordernidad, sería difícil concebir un sistema plausible donde las clases tradicionalmente sometidas puedan acumular un potencial de lucha semejante al que es posible acumular en una democracia. Es más, me animaría a decir que el potencial de lucha de la clase obrera, por ejemplo, es (en tanto potencialidad) tremendamente mayor al que poseen las clases hegemónicas. Si esta potencialidad demora en concretarse, es sin duda porque la clase obrera continúa siendo dominada culturalmente, y sometida percepciones y valores que le son ajenos. Me pregunto cuánta reponsabilidad tendrá la escuela de que esta reproducción del statu quo continúe tan arraigada en nuestras sociedades.

Lo más leído

El origen de lo ‘bueno’ y lo ‘malo’

E n su 'Genealogía de la Moral', Nietszche proponía la lúcida hipótesis de que las palabras de contenido moral fueron acuñadas por las clases poderosas como un modo de denominarse a sí mismas y de caracterizar sus acciones. Luego, tras la decadencia de esas clases dominantes, las palabras habrían quedado ligadas únicamente a valoraciones morales. Como la mayoría de los ejemplos que da Nietszche provienen del alemán, del inglés o del griego, me tomé el atrevimiento de investigar acerca del origen de los términos ‘bueno’ y ‘malo’ en el castellano. Tal vez mis conclusiones sean apresuradas dado mi escasa (está bien, mi nula) preparación filológica, pero por lo menos, he dado con algunas relaciones sugestivas. A saber: La palabra ‘bueno’ proviene del latín ‘bonus’, que, entre sus muchas acepciones incluye la de ‘rico’, ‘adinerado’. Así parece haber sido utilizada por Cicerón, en “Video bonorum urbem refertam” (“Veo que la ciudad está invadida de ricos” –o, forzando la literalidad...

Infant sorrow (traducción)

E l inclasificable William Blake escribió mucho sobre la infancia y la maternidad. Para el día de la madre, no encontré nada que me agradara más que volcar la traducción de uno de sus cantos de experiencia. Cierto es que el tono general de la poesía choca con el carácter festivo de la fecha. En este poema, es la desesperación lo que une al niño a su madre. Sin embargo, aunque oscuro y descorazonador, este poema como todos los de su serie oculta un ténue brillo de esperanza: la presencia de la madre promete amparo y serenidad. A ella le es otorgado el rol de guía y protectora en un mundo inevitablemente opresivo y desconsolador: LAMENTO DE NIÑO (de William Blake) Mi madre gimió, mi padre lloró, Sobre el peligroso mundo me abalancé. Indefenso, desnudo, chillando con desesperación Como un demonio agazapado en una nube. Forcejeando entre los brazos de mi padre, Riñendo con mis fajas ajustadas; Oprimido y agobiado, no hallé mejor consuelo Que hacer berrinche sobre ...

El perro triste (cuento)

T enía 17 años cuando tomé la decisión de escribir con asiduidad. De aquella época guardo en mi computadora una carpeta titulada Primera etapa , con un puñado de cuentos escritos entre 1993 y 1995, y que desde el 2000 a esta parte tenía prácticamente olvidados. Durante años, estos cuentos me avergonzaban por su ingenuidad; cuando los escribí, sin embargo, era otra persona y ya no los siento propios. Esto me permitió volver a ellos con menos prejuicios, y hoy creo que se merecen un mejor final que morir arrumbados en un disco rígido ya bastante repleto de cosas olvidadas. Así que decidí revisar toda esta serie -y disimular sus más claras imperfecciones- para publicarla en este blog. Se trata de unos diez cuentos vagamente entrelazados, y mi intención es publicar uno nuevo cada dos semanas, sin ningún orden definido. El primero es el que da nombre a la serie, que había llamado Cuentos de un perro triste. De modo que empecemos: EL PERRO TRISTE Nadie se había puesto de acuerdo en un nombre...